Por Bruno Trieb 9 - 33
Apartheid, Xenofobia, Supremacismo racial, discriminación: todo ello igualmente reprobable... el sueño de Lennon: imagina que no hay fronteras ni religiones, aunado a la visión unificadora y vinculadora que las corrientes llamadas "espirituales" proclaman: sí, son dignas de encomio y son visiones en las cuales movimientos como el hippismo y la nueva era se sostienen, pero no dejan de ser un sueño romático; sin embargo, más allá de las opiniones, reproches o buenos deseos, están las causas fundamentales.
La Soberanía, para que no sea una palabra vana debe garantizar que el pueblo dicte y haga valer sus propias leyes y garantice el derecho de reunión. El pueblo de Arizona y de todo EE. UU. en lo particular y los paises en su mayoría, en lo general gozan de este derecho: son pueblos Soberanos.
El asunto que pretende resolver la ley SB1070 no es privativo de Arizona o de EE. UU., el mismo problema lo tenemos en la frotera sur, el mismo problema sufre España con Marruecos y el mismo problema tuvo Alemania...
Si algo aprendimos de esa sangrienta lección es que ante la intolerancia, ante el fascismo, ante el radicalismo, no valen las marchas, los mítines ni las protestas de los pueblos civilizados. Más vale salir de ese país gobernado por radicales expansionistas y genocidas.
¿Acaso se detuvo EE.UU. para INVADIR Irak, aun cuando la ONU y el mundo entero se opuso? No, ellos no se van a detener, más les valdría a 20 millones recuperar su patriotismo y regresar a su país a trabajar: Sí, a trabajar en el agro, para reconstruir nuestra precaria economía y poca sustentabilidad. ¿No tenemos el ejemplo de China? (haciendo a un lado la represión y la pérdida de garantías individuales).
Antes de proseguir con marchas desgastantes y protestas no olvidemos las causas primeras: ¿Qué hizo que 20 millones de mexicanos emigraran?: El "sueño americano" y la decepción de su país, pero no de la tierra, no de la mexicanidad, no de la identidad de mexicanos, están decepcionados de su país gobernado por corruptos que promueven la apatía y la ignorancia, asunto que tampoco es privativo de la ultraderecha (PAN) que, como es lógico, como conservadores, se aferran a conservar ese esquema. Este país gobernado por corruptos e ignorantes poco virtuosos, agravó su condición a mediados del siglo pasado, con el florecimiento del PRI, de donde surgieron muchos de los pseudo izquierdistas que fundaron el PRD.
Lejos de pretender "mexicanizar" el "gabacho" o recibir cada año a "pochos" y "agringados" que vienen a presumir de comodidades que les cuestan humillaciones y malos tratos, invito a que esos mexicanos se cimbren ante un sólo grito: ¡GUERRA!
No esa guerra idiota de las armas donde inocentes mueren, sino la guerra declarada de las ideas y el trabajo duro, igual o más duro que en esa tierra de apátridas, pero un trabajo que de ogullo, que esté pleno de derechos y sin duda restaure el orden.
¿Por quien votaremos en las próximas elecciones? es un asunto íntimo, pero la pregunta en el aire es: ¿Cuál partido garantiza la recuperación económica a partir de la generación de empleos para 20 millones de mexicanos que claman por un México mejor?